Guerra al sostén

Soutien, corpiño, brasier, sujetador, sostén, no importa cómo se lo llame, para el médico Jean-Denis Rouillon llevarlo daña las mamas.

Desde el año 1997, el médico deportivo y profesor de la Universidad de Franche-Comté Jean-Denis Rouillon ha observado y medido los pechos de 320 mujeres con diferentes tamaños de busto para estudiar cómo evolucionan sin sujetador. Los primeros resultados del "estudio preliminar" sobre 50 mujeres de entre 18 y 35 años ponen en duda su utilidad.

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La investigación revela que al no llevar sostén los pechos recuperan firmeza. Además, las mujeres aseguraron que mejoraba su respiración y su comodidad.

El doctor, que ha armado un gran revuelo en los medios, ha afirmado que "los primeros resultados validan la hipótesis de que el sujetador no es necesario. Médicamente, fisiológicamente, anatómicamente, el seno no se beneficia de la privación de la gravedad. La decisión de llevar un sostén es una apelación a las mujeres en términos de estética. Contrariamente a la creencia popular, sin él la mama no se cae sino que se contrae y se levanta, y mejora la calidad de la piel".

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Sin embargo, las mujeres los hemos usado en sus diversos diseños a lo largo de toda la historia. Además, que el doctor me disculpe, pero una cosa es no llevar sostén cuando se tiene una talla pequeña, y otra muy distinta cuando se tiene una talla grande o extragrande. Si no fuera así no exisitirían las cirugías estéticas reductivas.

A mí me parece más una cuestión de lógica si se lo piensa en términos de kilos y gravedad. Si tus mamas apenas pesan tenderán a caerse menos, pero si en cambio, como le pasaba a una amiga mía que terminó en el quirófano, tus pechos son glandulares y por tanto muy pesados el resultado de no usar sostén va de suyo.

¿Que es incómodo? Para mí sí lo es, y me encantaría no usarlo más, pero para mi amiga, la del quirófano, que hasta dormía con uno, era inconcecible la idea.

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Encima, al doctor seguro que la industria de la lencería lo debe de estar amando...

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