Rosado de niña y azul de niño, ¿o al revés?

Rosado de niña y azul de niño, ¿o al revés?

Texto: Mercedes Martínez

Cuando vas a un baby shower y sabes que el hijo de tu amiga es un varón, ¿consideras llevarle de regalo algún conjunto rosado? O, si es niña, ¿un suéter azul?

“Hoy en día la gente sabe cuál es el sexo de un bebé o de un niño pequeño a primera vista: una cinta de color rosado en la cabeza es suficiente”, señala Jo B. Paoletti, historiadora y autora del libro Pink and Blue: Telling the Girls From the Boys in America, en el portal del Instituto Smithsonian. Pero, ¿siempre ha sido así? ¿Cuál es la historia detrás de esta división de las rosadas y los azulados?

Casi siempre asociamos el rosado a las niñas y el azul a los niños. Foto: Thinkstock.
Casi siempre asociamos el rosado a las niñas y el azul a los niños. Foto: Thinkstock.

No, no siempre fue así

Durante siglos, los niños llevaban vestidos blancos hasta los 6 años (hombres y mujeres). Era una cuestión de practicidad; además, las personas creían que vestir a los bebés de otro color podía pervertirlos, cuenta Paoletti.

[Relacionado: Consejos para construir una rutina con tus hijos]

En el 1900, el rosado y el azul en tonos pasteles fueron apropiados tanto para niños como para niñas, sin mayores problemas, indica la experta en su blog Gender Mystique. La transición hacia el color de la ropa en función del género tomó su tiempo y fue lenta.

El mundo del revés

Para 1918 el asunto era completamente diferente de cómo es ahora. Paoletti declara en el sitio del Instituto Smithsonian que ese año, la publicación comercial Earnshaw's Infants' Department estableció: “La regla generalmente aceptada es el color rosado para los niños y el azul para las niñas. La razón es que el primero, al ser un color más decidido y más fuerte, es más adecuado para el niño, mientras que el azul, que es más delicado y exquisito, más bonito para la niña”.

Ese mismo año, la revista Ladies’ Home Journal distinguía al rosado como el adecuado para los varones, ya que se trataba del más cercano al rojo, el cual, según The Forgotten History Blog, definían como “un color feroz”.

[Relacionado: Método Montessori: otra forma de enseñar]

Como lo conocemos hoy

Fue en la década de 1940 cuando se instaló la “división” de los colores, en base a las preferencias de los estadounidenses interpretadas por fabricantes y minoristas. “Podría haber sido al revés”, dice Paoletti.

Durante la generación de los baby boomers, los niños comenzaron a vestirse con ropa específica según el género: los varones como sus padres y las mujeres como sus madres, explica la experta.

Sobre gustos…

¿Es realmente el rosado el tono preferido de las mujeres? Los gustos no siempre siguen los dictámenes culturales. En 2007, un estudio británico publicado en la revista científica Current Biology pidió a un grupo de adultos escoger su color favorito. Tanto en hombres como en mujeres, el ganador fue el azul. Igualmente, ellas también presentaron una preferencia mayor por el rojo que sus pares masculinos. Eso sí, el rosado “delicado y exquisito” ¡no tuvo suerte en la investigación!

[Relacionado: Los beneficios de la fisioterapia en el embarazo]

¿A ti cuál te gusta más: el azul o el rosado?

 Mira también: