Cuatro pasos sencillos para organizar tu clóset

El clóset es seguramente el espacio que necesitas organizar más seguido. Pero tener tu armario soñado no es tan difícil de lograr, solo debes aprender a aprovechar al máximo el espacio que tienes. Sin importar si posees un ropero pequeño o gigante, con estos pasos puedes asegurarte que se mantendrá organizado y ordenado por más tiempo.


Edita
¿Cuándo fue la última vez que revisaste lo que tenías en el clóset? Trata de editar tu ropa y zapatos una vez al año. Observa todas tus prendas, y tira las que estén rotas o manchadas. La ropa que esté en buena condición puede ser donada o vendida a tiendas de segunda mano, en ventas de garaje o por sitios como EBay. Haz lo mismo con todos tus  bolsos y joyería. Sé franca contigo misma: lo que no te queda o no usas seguido solo ocupa lugar.

Si aprovechas el espacio de tu clóset para guardar otros documentos, tómate tu tiempo para revisarlos también. Decide si puedes poner estas cosas en otra habitación, ya que mientras menos acumules, más fácil será mantenerlo organizado.


Clasifica
Pon en la cama todo lo que piensas guardar en el clóset. Acomoda por temporada primero. Luego separa por el tipo de prenda. Pon los pantalones juntos, y las blusas en otro lado. Si quieres organizar tu ropa por color, éste es el momento para hacerlo. Pon los zapatos en sus cajas si las tienes, y escribe qué hay adentro de ellas si son parecidas.


Haz un plan
Una vez que puedas ver exactamente qué y cómo lo tienes que guardar, estudia tu clóset. ¿Tienes el espacio suficiente para tus zapatos? ¿Hay repisas para las camisas? Planea qué necesitas agregar para que el espacio sea más funcional. Puedes poner más soportes para colgar ropa, un zapatero de puerta o canastas. Haz una lista y ve de compras. No te preocupes por comprar las últimas soluciones de almacenamiento para clóset, solo invierte en lo que necesites para que se pueda aprovechar al máximo.


Acomoda
Una vez que todo esté listo es tiempo de acomodar todo. Plancha y lava antes de guardar si hay prendas que necesiten refrescarse. Luego acomoda de la misma manera que clasificaste. Para mantener el orden trata de supervisarlo cada semana. Aunque solo necesites doblar y colgar algunas prendas, podrás mantener la armonía visual si trabajas un poco cada ciertos días.

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