Enfrentar las críticas por un tratamiento de fertilidad

Luego de transitar el camino de la búsqueda de la llegada de un hijo por el sendero natural, muchas parejas se encuentran ante la situación de un diagnóstico que manifiesta que ello no sucederá. Ante ello, las parejas arriban al momento de decidir qué tipo de ayuda buscarán para lograr ese deseo tan profundo de tener un hijo.

Enfrentar las críticas por un tratamiento de fertilidad / Foto: Thinkstock
Enfrentar las críticas por un tratamiento de fertilidad / Foto: Thinkstock

Es esperable que recorran a su vez las preguntas que colaborarán en tomar la mejor decisión posible: cuál es la mejor opción para ellos, qué tratamiento eligen o qué decisión tomarán frente al diagnóstico de esterilidad o infertilidad.

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Se trata de una decisión en sí misma, producto de búsqueda de información, de acuerdos dentro de la pareja, y no puro forzamiento médico, pacientes que solo siguen el paso a paso propuesto.

En este sentido el mundo social que los rodea suele ser importante. Tal como sucede con todos los temas relacionados con la maternidad y paternidad, ¡todos opinan!

Muchos de ellos, basados en la buena intención, no evalúan las consecuencias que sus opiniones pueden tener en quienes están transitando este camino.

Por ello algunas parejas se cuestionan si anunciar el inicio del camino de los tratamientos de fertilidad para lograr este objetivo tan deseado o mantenerlo en reserva en el marco de la intimidad de la pareja.

En esta época estamos entre todos construyendo este contexto, y desde allí es entendible que muchos se sientan cómodos con ello y otros ajenos.

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Cuando nos planteamos dudas de este tipo es porque nos enfrentamos a algo desconocido. Cualquier cambio importante provoca miedo, incertidumbre... pero solo se puede avanzar si existe la seguridad de querer hacerlo, enfrentándonos al miedo propio y a la mirada de los otros.

Tal vez con el tiempo se naturalice esta opción de mano de la ciencia, que trae respuestas a quienes desean tener un hijo y solos no pueden.

Se espera que quienes sienten el deseo de tener un hijo, de la manera que sea: naturalmente, con ayuda de la ciencia o de la ley, como es el caso de la adopción, puedan compartirlo con el resto del mundo y sean acompañados del el respeto por las decisiones personales y el amor que está incluido en esta decisión.

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Marisa Russomando es psicóloga especialista en Maternidad y Crianza y directora de La Cigüeña