Yahoo Estilo El dulce trabajo de un chocolatier
Texto: Mercedes Martínez
Imagínate verte envuelta día y noche por el sabor y el aroma del chocolate. Debatir sobre su consistencia, perfeccionar la técnica para lograr el mejor bombón y, lo mejor, que te paguen por ello. El trabajo del chocolatier bien podría ser tu empleo ideal. Conoce lo que conlleva ser un Willy Wonka.
La alquimia del sabor
“Los maestros chocolateros atraviesan un largo proceso en el desarrollo de nuevos productos, la creación de recetas con diferentes ingredientes y la degustación de las muestras, hasta encontrar el perfil de sabor perfecto”, asegura la chocolatier Ann Czaja, en una entrevista con el blog especializado Cooking with Books. “Una receta puede demorar entre uno y dos años, desde el inicio hasta que el producto final se perfecciona y sale al mercado. Se trata de un proceso largo y reflexivo”, añade.
La pasión es fundamental
Para ser todo un máster en la escena del chocolate, la experiencia, el aprendizaje y la pasión son elementos significativos. Czaja recomienda a los aspirantes entender que este oficio exige largas horas de trabajo duro, por lo que es importante asegurarse de que el amor por el chocolate sea auténtico.
William Curley, propietario de la chocolatería inglesa que lleva su nombre, cuenta a la cadena de noticias BBC que se inició en este arte mientras trabajaba en la sección de pastelería de algunos de los principales restaurantes del Reino Unido.
Después de varios años de trabajo, Curley logró abrir su propio negocio en el 2004, y no por ser el jefe el trabajo se redujo. Actualmente, cuenta con nueve cocineros, pero la complejidad del oficio requiere un ojo de águila, y Curley disfruta de vigilar cada detalle de la preparación de los productos que llegan al público.
Las herramientas para ser el mejor
Como en cualquier ocupación, un buen chocolatier debe contar con herramientas específicas para llevar a cabo su labor. La experta detrás de la chocolatería Nunu de Brooklyn, Colleen Riley, detalla a Yahoo Food la función de algunos de los utensilios que nunca deben faltar sobre la mesa de trabajo:
Espátula de goma o hule: “La uso básicamente para todo… Para hacer el caramelo, revolver el chocolate o hacer el ganache”, dice.
Bols para derretir el chocolate: “Hay mucho que revolver”, agrega Riley.
Raspador: esta especie de espátula pequeña y dura resulta ideal para moldear y cortar mantequilla, y hasta para limpiar la mesa o los moldes.
Moldes: para hacer los chocolates, Riley opta por aquellos de policarbonato.
Espátula offset: llega el momento de alisar el chocolate ya vertido en los moldes antes de refrigerarlo. Para esto, la chocolatera pasa su espátula offset.
Cuéntanos: ¿considerarías que tu pasión por el chocolate es lo suficientemente importante como para ser la próxima Willy Wonka?
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