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Mitos sobre la meditación que deberías dejar de lado

Texto: Martín Cagliani

La meditación se viene practicando desde hace miles de años y nació con la meta de lograr un entendimiento más profundo de las fuerzas sagradas y míticas de la naturaleza. Pero en la actualidad, se la utiliza como una forma de relajación, de quitarnos el estrés que acumulamos en las pesadas jornadas de trabajo típicas de las grandes ciudades. Cualquiera puede hacerlo, pero es importante que antes de empezar, destierres los mitos que rodean a esta práctica.

 

Desterramos los mitos sobre la meditación. Foto: Thinkstock
Desterramos los mitos sobre la meditación. Foto: Thinkstock

" No puedo meditar por falta de tiempo"

Todos estamos ocupados, especialmente si vivimos en la vorágine de la gran ciudad. Con pasar, aunque sea, algunos minutos meditando, podríamos restaurar la calma y la paz interior, según indicó la Clínica Mayo.

Además, no se requiere de un equipo, ni de un lugar especial, cualquiera puede practicar la meditación en donde sea que esté, ya fuere caminando, viajando en el autobús, en la sala de espera del médico, o incluso en medio de una complicada reunión de negocios, informó la institución mencionada.

Lo importante es enfocarse en algo, en la respiración, por ejemplo, esto te permitirá aislarte del ambiente que te rodea.

No puedo meditar porque no puedo quedarme quieta”

Si no estás cómoda manteniendo una postura sentada o recostada, sin moverte, existen alternativas para poder meditar. Por ejemplo, combinar la caminata con la meditación puede ser una forma eficiente y saludable de relajarse, indicó la Clínica Mayo. Puedes concentrarte en tus piernas y pies, repitiendo palabras en tu mente, como “levantar”, “mover”, “pisar”, para cada paso.

No puedo meditar por que no sé si lo estoy haciendo bien”

Cualquiera puede meditar, como decíamos, y vimos que se puede hacer casi en cualquier posición, y en cualquier lugar, solo se necesita eliminar las distracciones enfocando nuestra atención en una palabra elegida, en algún conjunto de palabras como una frase, o mantra, o un poema; o tal vez en un objeto. De todas formas, lo más usual es concentrarnos en nuestra respiración, y en tener un actitud “abierta”, que permita que las distracciones pasen como si nada, sin que logren quitarte el foco, como recomendó el Centro Nacional para la Salud Complementaria e Integrativa, de EEUU (NCCIH, por sus siglas en inglés).

Se supone que uno no debe tener pensamientos mientras medita”

Esto no sería así, pues como veíamos antes, lo que se debe lograr es enfocar la atención en un único pensamiento. Deepak Chopra, uno de los expertos más famosos en meditación, afirmó en su sitio Centro Chopra para el Bienestar: “La naturaleza de la mente de moverse de un pensamiento a otro es, de hecho, la mismísima base de la meditación” y agregó: “No eliminamos la tendencia de la mente de saltar de un pensamiento a otro. No es posible. Tener muchos pensamientos no te descalifica para poder meditar”.

La meditación es algo religioso o espiritual”

No necesariamente. Como vimos, cualquiera puede hacerlo, y no necesariamente para enfocarlo como una práctica religiosa o espiritual, sino simplemente para mejorar la salud mental.

Existen numerosos estudios que han investigado sobre cómo la meditación mejoraría la salud: hay evidencias que indican que reduciría la presión arterial, o los síntomas de síndrome del colon irritable, informó el NCCIH y agregó que también aliviaría los síntomas de la ansiedad, la depresión y ayudaría a quienes sufren de insomnio.

Sin embargo, no se debe utilizar la meditación para reemplazar la medicina convencional, o que sea una razón para posponer la visita al médico si tenemos algún problema de salud.

Recuerda que ante cualquier duda sobre tu salud y estilo de vida, deberías consultar con un médico.