7 características de un entrenador personal exitoso

El oficio de entrenador personal (EP), va más allá de diseñar y asignar un programa o rutina de ejercicio; implica aprender día con día cómo llegar a ser mentor, motivador y amigo… es tener la pericia de reconocer qué es lo que hace a la gente desistir, mantenerse o ir por el éxito; pero lo más importante es que sea capaz de detectar a tiempo los límites y las habilidades de sus clientes.

Si vas a contratar a un entrenador personal, no solo te fijes en su curriculum y/o en su físico; asegúrate de que tenga las características de un entrenador personal exitoso. A continuación te decimos cuales son…

1. Cordialidad: un EP debe ser un líder que siempre tenga buen trato y paciencia con sus clientes; no solo se trata de dictar ejercicios, contar repeticiones y ayudar a cargar pesos; también es importante que sepa entablar una relación de cordialidad con sus entrenos, la cual les brinde respeto, confianza y cercanía.

2. Autoridad moral: al igual que un maestro, sacerdote, familiar o amigo, un EP es una autoridad moral para sus alumnos… un entrenador que refleja en su trabajo entereza, profesionalismo, liderazgo y buen ejemplo, siempre será visto como esa figura que inspira seguridad y confianza para hacer todo lo necesario para lograr metas personales.

3. Asertividad: es importante que un EP sepa expresarse de manera directa, concisa y equilibrada, de tal forma que pueda comunicar sus ideas; es decir, sin ser impositivo pero siempre seguro de lo que busca para su alumno. Por lo tanto, un entrenador asertivo logra establecer un vínculo comunicativo con su cliente sin que sienta agresiva la indicación; o al contrario, que sienta que puede manipular al entrenador a su voluntad y capricho.

4. Motivador: un EP exitoso no se debe limitar a poner el programa, aplicarlo y evaluar; es importante que todo el tiempo utilice sus mejores cartas para mantener motivados a sus entrenos y estos logren llegar más rápido y fácil a la meta planeada. La motivación deberá ser continua para que su gente no pierda el interés de asistir al ejercicio… posiblemente éste sea su mayor reto.

5. Responsabilidad: es importante destacar este rasgo, tanto personal como profesional que todo EP debería tener…no solo nos referimos a la puntualidad o asistencia en su trabajo; recordemos que el hecho de trabajar con personas implica una enorme responsabilidad por lo complejo que resulta. Por ejemplo, si un arquitecto se equivoca en un plano, se verá reflejado en el acabado de la obra; cuando un financiero comete un error, pues probablemente habrán pérdidas importantes en una transacción; pero un EP es como los médicos, si cometen algún error con su cliente (paciente), las consecuencias pueden ser irremediables al grado de dejarlo marcado de por vida.

6. Capacidad de organización y planificación: el EP debe tener siempre para ti un plan, meta, reto u objetivo que puedas lograr. Para ello, es necesario que cuente con el hábito de planear y organizar el programa de cada cliente a corto, mediano y largo plazo. De hecho, será de gran utilidad para el EP que le digas exactamente lo que deseas lograr, lo que NO quieres, que te gustaría hacer, que odias hacer, que te da miedo, etc.

7. Actualización: un EP debe prepararse continuamente en todo (tendencias, metodologías, nutrición deportiva, fisiología, biomecánica, primeros auxilios, técnicas innovadoras, etc); incluso debería tomar cursos de marketing y servicio al cliente con la idea de brindar un mejor servicio con buenos resultados…

En conclusión, un “EP exitoso” requiere de vocación, educación continua, sentido de responsabilidad, actitud de servicio, ética, compromiso, profesionalismo, y pasión por su trabajo.