Para dejar de fumar, servirían más los castigos que los premios

Para dejar de fumar, servirían más los castigos que los premios

El 31 de mayo es el Día Mundial Sin Tabaco, una ocasión especial para animarse a abandonar el vicio. La gran pregunta es cómo. El primer paso, probablemente, sea pedir ayuda. Según la Sociedad Americana contra el Cáncer, solo entre un 4 y un 7% de los fumadores son capaces de dejar sin asistencia profesional o medicinas.

Por esto es tan importante un nuevo estudio publicado en la revista científica The New England Journal of Medicine, que indagó en un método sorprendentemente efectivo para liberarse del tabaco.

Dejar de fumar es más difícil sin ayuda. Foto: Thinkstock
Dejar de fumar es más difícil sin ayuda. Foto: Thinkstock

¿Menos recompensas, más castigos?

Los investigadores, liderados por el Dr. Scott Halpern, profesor de medicina de la Universidad de Pennsylvania, hallaron que las personas que seguían un programa basado en “castigos” tenían el doble de probabilidades de dejar de fumar, que aquellos inscriptos en un plan en el cual obtenían premios.

El estudio se basó en 2.538 fumadores. Fueron divididos (voluntariamente) en los dos programas. Aquel centrado en las recompensas les ofrecía US$ 800 a quienes lograban quebrar el vicio, mientras que el segundo ofrecía depósitos reembolsables de US$ 150 y prometía US$ 650, a quienes triunfaran.

[Relacionado: ¿Qué te causa tanta fatiga?]

Ambos programas resultaron mejores para abandonar el tabaquismo que no haber recurrido a ningún tipo de ayuda. Lo más sorprendente, quizás, es que aquel basado en castigos tuvo una tasa de éxito significativamente mayor que el que simplemente ofrecía un premio. ¿El problema? Pocas personas lo eligieron voluntariamente. Casi todos los participantes se inclinaron por el otro programa.

Desde una perspectiva de salud pública, esto significa que el programa de castigos no puede ser usado en grandes números de personas, por su poca aceptación. Ciertamente, resultó más efectivo el castigo que el premio, y quienes participaron probablemente vivieron el riesgo de perder dinero como un incentivo más fuerte que ganar”, opinó a Yahoo el Dr. Alejandro Videla, coordinador de la Clínica de Tabaquismo del Hospital Universitario Austral en la Argentina, y consultor del Ministerio de Salud del mismo país.

La autoconfianza, clave

Deborah Ossip, directora del programa de investigación sobre tabaquismo del Departamento de Salud Pública del Centro Médico de la Universidad de Rochester, aportó otra teoría acerca de por qué el programa de castigos surtió más efecto. Puede que las personas que voluntariamente se inscribieron en él, hayan estado más confiados de que eran capaces de dejar de fumar. “Uno de los factores predictivos de éxito es creer que puedes lograrlo”, señaló la experta a Yahoo Health.

[Relacionado: El tabaco, enemigo de los dientes y las encías]

Buscar ayuda, lo principal

Según estadísticas internacionales, mencionadas por el Dr. Videla, un 70% de los fumadores intentan dejar sin estrategia. “Los fracasos se deben a que la adicción al cigarrillo tiene tres componentes: una adicción biológica a la nicotina, que produce síntomas físicos de abstinencia, una adicción comportamental, en la cual las actividades cotidianas se unen al hecho de fumar, y una adicción social, que hace que determinadas situaciones o grupos de personas disparen las ganas de fumar. Un tratamiento efectivo para abandonar el tabaquismo tiene que considerar los tres componentes”, indicó el experto entrevistado.

[Relacionado: Tabaquismo afecta diferente a hombres y a mujeres]

Si quieres dejar de fumar, recuerda consultar a tu médico de confianza.

@marianisrael

Entrevista con: Dr. Alejandro Videla, coordinador de la Clínica de Tabaquismo del Hospital Universitario Austral en la Argentina, y consultor del Ministerio de Salud de la Nación (Arg.).