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Hablemos del calcio y la osteoporosis

La osteoporosis es una enfermedad en la que se presenta una disminución de la fuerza y densidad de los huesos, y que ocasiona que éstos se vuelvan porosos y frágiles, dando como resultado que exista un mayor riesgo para presentar fracturas. La osteoporosis suele ser frecuente en mujeres después de la menopausia y en personas mayores de 70 años de edad.

Hablemos de la osteoporsis
Hablemos de la osteoporsis

La adolescencia es una edad en la que los huesos tienden desarrollarse de manera más acelerada y reservan calcio para tener unos huesos fuertes a lo largo de la vida; si el organismo no consigue (por medio de la alimentación) las cantidades necesarias de calcio para otras funciones como la coagulación de la sangre o el adecuado funcionamiento de músculos y nervios, tomará el calcio de los huesos para poder cumplir dichas funciones. Lo anterior provocará un desarrollo deficiente de los huesos, volviéndolos quebradizos en edades más avanzadas de la vida, es decir que seremos propensos a padecer osteoporosis.

Dentro de las recomendaciones útiles para prevenir la osteoporosis podemos encontrar ingerir, entre los 9 y 18 años de edad 1 300 mg (miligramos) al día, a partir de los 19 años un gramo de calcio al día. Esto a través de alimentos como los lácteos, vegetales de hojas verdes, tortillas de maíz, entre otros. La vitamina D es también sumamente importante para que el calcio se absorba en los huesos, vitamina que podemos encontrar en algunos cereales y en leches enriquecidas con vitamina D, además de obtenerla a través de una adecuada exposición al sol (teniendo el cuidado recomendado con respecto a los rayos ultravioleta).

A pesar de que el consumo de aproximadamente un gramo de calcio es suficiente para prevenir la osteoporosis. lo ideal para mantener los adecuados niveles de calcio en el cuerpo es consumir tres o cuatro porciones de lácteos, incluidos leche, yogurt, queso bajo en grasa entre otros; debemos entender como porción un vaso de 250ml de capacidad.

El consumo de lácteos puede darse tomando diariamente, durante el desayuno, de una taza de leche descremada, semidescremada o deslactosada, también se pueden consumir yogurts o quesos bajos en grasas. Para tener una idea de las porciones a las que equivalen los miligramos de estos productos debemos saber que aproximadamente una taza de leche o de yogurt contienen aproximadamente 300 miligramos de calcio.

En el caso de que no consumas lácteos, puedes recurrir a otro tipo de alimentos como:

Recuerda consultar a tu médico para que pueda ofrecerte una adecuada dieta y otras sugerencias para que logres tener una buena calidad de vida.