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¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular

Resulta paradójico que un aparato desarrollado para facilitar la comunicación, la movilidad y la eficiencia produzca exactamente lo contrario. Me refiero a los smartphones. Evitemos echarle la culpa al objeto, tomemos un poco de distancia y miremos la situación: entre más “inteligente” sea el teléfono celular, menos inteligencia (emocional, social, creativa e incluso física) requiere el usuario, ya que el dispositivo emula muchas de esas funciones de tal manera que la persona ya no necesita memorizar un teléfono, ubicarse en un mapa o trasladarse para encontrar a alguien.

¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular
¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular

La desconexión que provocan los smartphones se da con su sola presencia. Así lo mostró un estudio reciente publicado en la revista Social Psychology. Cuando hay un celular encima de la mesa de trabajo, aun cuando la persona no use ni una sola vez, se reduce en un 20% su desempeño cognitivo. Esto se debe, probablemente, a que después de tantos años de usarlos, estamos predispuestos a recibir mensajes. Aunque el celular no dé señales de actividad, desviamos constantemente la vista hacia él, con lo que perdemos la atención y el enfoque.

Imaginemos: estamos concentrados trabajando en un reporte y entra la notificación de un mensaje, un "me gusta" o un correo nuevo. Aunque no miremos la pantalla, el cerebro tiene que efectuar una serie de operaciones para tomar una decisión: contesto, no contesto, ahora, más tarde, puede esperar, etcétera. Además de distraernos, terminamos más cansados, porque estamos lidiando con muchos asuntos (y no todos de la misma trascendencia).

¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular
¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular

La forma en que esta “tentación” nos afecta se extiende más allá de las tareas del trabajo, la creación o la escuela. Otro estudio de la Universidad de Essex mostró que la sola presencia del celular también interfiere con nuestra habilidad para formar vínculos interpersonales sólidos. El experimento resulta bastante revelador: los participantes, que no se conocían entre ellos, fueron divididos en dos grupos. A ambos se les pidió que conversaran uno a uno y que compartieran una experiencia personal importante vivida en el último mes. En un grupo, durante la conversación, quien narraba su experiencia podía tener su teléfono celular sobre la mesa; en el otro, sólo colocaron un simple cuaderno de espiral. Luego, ambos grupos reportaron sus impresiones.

Quienes conversaron ante la presencia de un celular en la mesa, percibieron cierta falta de comprensión y confianza, además se mostraron renuentes ante la posibilidad de formar una amistad con esa persona. La segunda parte del estudio, realizado en Virginia Tech, confirmó que la presencia del celular no sólo produce impresiones de distancia o falta de empatía, sino que disminuye la calidad de la conversación. Como si fuese un imán que atrae una y otra vez la mirada y la atención, la presencia del smartphone reduce el contacto visual entre los participantes, por lo que dejan de percibir cambios y sutilezas en la expresión o el tono.

La interferencia de un smartphone con los procesos de la memoria va más allá de disminuir nuestra capacidad para recordar información a corto plazo. Para que el cerebro transfiera información desde la memoria de corto plazo a la de largo plazo, requiere periodos de calma. ¿Y qué hacemos en esos plazos ahora? Revisamos el correo, vemos el muro de Facebook, respondemos mensajes… Ahora el cerebro tiene menos oportunidades de procesar la información correctamente, por lo que estamos sujetos a cometer errores. En el futuro, quizás descubramos que nuestros recuerdos están incompletos, llenos de agujeros, interrupciones y spam.

¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular
¿Problemas de memoria, concentración o relaciones? Apaga tu celular

¿Soluciones? A mí me funciona desconectar los datos e internet del teléfono mientras duermo, cuando estoy en una reunión o en una conversación importante. Sé que si hay una emergencia, siempre podemos solucionarlo “a la antigua”: haciendo una llamada. Pero cada quien debe encontrar la opción que funciona mejor de acuerdo con sus necesidades e intenciones.

@luzaenlinea

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