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PasionariaChakrub, el dildo de cristal
Hace un año me encontré a una compañera que no veía desde la secundaria. Resulta que después de estudiar psicología, se volvió una disciplinada practicante del budismo y da terapia con piedras y cristales. Ella está especializada en la obsidiana, una piedra de origen volcánico que abunda en México; entre las propiedades terapéuticas que mencionó al vuelo estaban la de reconectar a la mujer con la tierra y ayudar a limpiar los traumas que se alojan en el útero. Guardé aquella conversación en la carpeta de mi memoria donde pongo los "temas curiosos", pero hace unos días reapareció en una conversación sobre juguetes sexuales. Alguien contó que había visto en internet unos dildos hechos con cuarzo y otros minerales, que prometen equilibrar la energía y las emociones.
La curiosidad siempre puede más, así que busqué información al respecto y lo que encontré me dejó boquiabierta. Los juguetes en cuestión fueron creados por Vanessa Cuccia y están hechos 100% de minerales, como cuarzo, ónix, jade, etcétera. Según dice el sitio de la marca Chakrubs: “le dan un sentido sagrado al juego”.
Vanessa Cuccia, la diseñadora de estos juguetes, cuenta que después de vivir con un maestro espiritual aprendió mucho sobre el valor terapéutico de los cristales. La idea de transformarlos en juguetes se dio cuando llegó a casa de una mujer que coleccionaba minerales, y al ver unas piedras con forma alargada, pensó que serían un gran juguete sexual. En una entrevista para el sitio Marie Claire, Cuccia dijo que siempre había buscado algo que le ayudara a conectar el sexo con su parte emocional, espiritual e intelectual. “Quería conectar la sexualidad con la metafísica; meditar a través del propio placer; sentirme bien por lo que estaba metiendo en mi cuerpo”, declaró Cuccia. Y después de hacer algunas pruebas, quiso compartir su hallazgo con el mundo.
Entiendo perfectamente a esta mujer, mi corazón está de su lado y celebro su iniciativa. Nada me entusiasma más que las personas que buscan darle un profundo sentido de unidad lo que la modernidad se esmeró en dividir, banalizar o desestimar.
Vale la pena entrar al sitio a leer los testimonios de los usuarios. Creo que nunca antes había leído comentarios sobre el uso de un juguete sexual que incluyeran palabras tan significativas como amor, éxtasis, generosidad, sanación, sagrado o transformación. Para mí, esto confirma que el juego es tan importante como el juguete. En ese sentido, la diseñadora se ha esmerado en proveer lo mejor de lo mejor. Todos los chakrubs (mezcla de las palabras chakra y rub, frotar en inglés) están hechos con material 100% mineral, son seguros e higiénicos, pues son inorgánicos y no tienen una superficie porosa donde puedan alojarse bacterias. De acuerdo con el sitio web, "crean armonía entre cuerpo, mente y espíritu, reducen el estrés, sacan emociones reprimidas, quitan bloqueos provocados por traumas, crean una intimidad más profunda con la pareja, incentivan el despertar de la conciencia y permiten sintonizarse con intenciones de bienestar".
Las cosas son lo que uno cree que son, por lo tanto, hasta que no pruebe la sensación de un chakrub, no tengo elementos para afirmar o negar sus propiedades metafísicas o terapéuticas. Sin embargo, aquí dejo un material apto para escépticos que explica las propiedades piezo-eléctricas del cuarzo, las mismas que permiten que ustedes y yo podamos leer esto en la computadora o en el smartphone. La operación mental es muy sencilla: si nuestro cuerpo funciona con impulsos eléctricos, es completamente lógico que la humedad de una mucosa incremente la conductividad y que, al contacto con el cuarzo, produzca sensaciones deliciosas. (Si usted es científico, lo invito a compartir sus reflexiones en la sección de comentarios.)
Independientemente del sentido y el uso que le demos a los objetos, hay que admitirlo: estos juguetes se ven hermosos. No sé ustedes, pero si yo tuviera que compararlos con el silicón y los motores, me quedo con la elegancia y la durabilidad de los materiales nobles.
@luzaenlinea
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