Abstinencia sexual no deseada: ¿tiene consecuencias?

Texto: Martín Cagliani

En el ser humano, el sexo es una opción más que un mandamiento instintivo del cerebro, como ocurre con otras especies. Se puede elegir la abstinencia por diferentes razones culturales o personales. Pero también puede suceder que el ayuno sexual sea indeseado, impuesto por circunstancias de la vida. En esos casos: ¿podría afectarnos negativamente?

 

La abstinencia sexual y la depresión podrían vincularse. Foto: Thinkstock
La abstinencia sexual y la depresión podrían vincularse. Foto: Thinkstock

Posibles consecuencias negativas

Si vamos a lo exclusivamente biológico, existen estudios, como el publicado en 2005 en la revista científica Fertility and Sterility, que indican que un ayuno sexual mayor a 10 días podría comenzar a dañar la calidad de los espermatozoides, por una baja movilidad de los mismos.

Pero, la mayoría de las veces, las consecuencias de esta abstinencia serían más psicológicas que físicas. “Si no lo usas, lo pierdes”, resume, en referencia a los varones, el terapeuta sexual David McKenzie, en la revista Canadian Living.

Según el experto, son muchas las variables que afectan la autoestima de una persona, pero el ayuno sexual involuntario podría tener un impacto sobre ella. El hecho de que nuestra pareja rechace los encuentros íntimos, podría dañar la autoestima, opina.

Cuando uno quiere, pero no puede

Mucha gente de entre 20 y 30 años no ha experimentado ningún tipo de experiencia sexual, ni siquiera besos o caricias, apunta la socióloga Elisabeth O. Burgess en el portal de salud WebMD.

Con su colega Denise Donnelly han realizado un estudio entre 60 hombres y 22 mujeres, cuya vida sexual no había comenzado, o estaba estancada desde hacía al menos seis meses. Descubrieron que esas personas, por lo general, experimentaban depresión, frustración y pérdida de confianza en sí mismas, afecciones que podían perturbar otros aspectos de sus vidas diarias.

Beneficios del ayuno sexual voluntario

De la otra orilla, la sexóloga Jessica O'Reilly cuenta en Canadian Living que sus clientes a veces reportan ventajas de una abstinencia sexual deseada. Por ejemplo, una mayor apreciación del placer físico y no meramente sexual, un mayor disfrute de las caricias y una mejor conexión con la pareja, destaca.

El elegir abstenerse por un período incluso podría ayudar a las mujeres a conocer mejor su cuerpo, según O'Reilly. El “ejercicio” sería particularmente positivo para aquellas que todavía no han podido experimentar un orgasmo con su pareja, indica. En esos casos, recomienda el autoconocimiento a través de la masturbación.

Según la sexóloga, ante una abstinencia no deseada, la masturbación podría ser una alternativa. No sería un sustituto, aclara, pero sí una vía para alcanzar los mismos beneficios fisiológicos del sexo, como el aumento de la circulación sanguínea, la quema de calorías, el alivio del estrés o un mejor descanso nocturno.

O'Reilly concluye que el valor que le demos al sexo moldearía el impacto que la abstinencia pueda tener sobre nosotros. Los motivos de este ayuno también incidirían en sus efectos.

Recuerda, ante cualquier duda, consultar a un especialista en sexualidad.