Cómo saber si tu bebé recibe suficiente leche materna

Como mamá, seguramente te preocupe que tu bebé reciba la nutrición necesaria para que pueda crecer sano y fuerte. Y, si estás amamantando, es normal que te preguntes si tu pequeño está recibiendo suficiente leche materna. A continuación, te brindamos algunas claves para averiguarlo.

Tu bebé ¿está recibiendo la nutrición que necesita? Foto: Thinkstock
Tu bebé ¿está recibiendo la nutrición que necesita? Foto: Thinkstock

¿Cómo saber si está bien alimentado?

De acuerdo con HealthyChildren.org, portal de la Academia Americana de Pediatría, no hay manera de saber exactamente cuánta leche bebe tu pequeño, pero sí hay formas de saber si está consumiendo la cantidad suficiente. Según el sitio, tu bebé bien nutrido debería:

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- No perder más de un 7% de su peso total en los primeros días después de su nacimiento, antes de comenzar a aumentar de peso.

- Mover el intestino una o dos veces en sus dos primeros días de vida, y al menos dos veces en el tercer y cuarto día. Entre los días cinco y siete, el número debería escalar a tres o cuatro deposiciones diarias y, a medida que tengas más cantidad de leche, tu niño probablemente defecará después de cada ingesta hasta que cumpla su primer mes.

- Mojar seis o más pañales al día, con orina casi transparente o de un amarillo pálido, entre los cinco y siete días de vida.

- Lucir satisfecho entre una y tres horas tras cada ingesta.

- Alimentarse entre ocho y 12 veces cada 24 horas.

¡Presta atención!

Además, el portal de la Clínica Mayo propone prestar especial atención a si tu bebé está tragando tu leche o no. ¿Cómo notarlo? Míralo y escúchalo cuidadosamente, para observar si traga cada dos o tres succiones. Quizás no haga ruido, pero deberías al menos notar una pequeña pausa en su respiración.

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Finalmente, dicho portal también sugiere concentrarte en la sensación de tus pechos mientras das de mamar. Si el pequeño está bien sujetado, deberías sentir un suave tirón en lugar de un pellizco en el pezón. También, puedes percibir los senos llenos, pesados y firmes antes de alimentar a tu niño, y más suaves o vacíos después.

Con estos tips, podrías asegurarte de que tu bebé está nutriéndose como debe. Eso sí: recuerda que cada niñito es diferente. Si tienes dudas, o antes de hacer cambios significativos en la dieta de tu bebé, no dudes en consultar al pediatra.

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