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Pan duro para recetas deliciosas

En tiempos de crisis derrochar es prácticamente un pecado mortal, por lo que aprovechar todo al máximo se convierte casi en una obligación. Por eso, ni siquiera el pan duro conviene ser desdeñado. Para aprender a sacarle todo el partido posible, Xavier Barriga propone fantásticas posibilidades en su libro Recetas caseras con pan de ayer.

Pan duro para hacer recetas irresistibles
Pan duro para hacer recetas irresistibles

Proveniente de una familia consagrada al pan, Barriga lleva amasando desde los 14 años en el negocio de sus padres y está considerado uno de los panaderos más prestigiosos de España.

En este libro, recopila medio centenar de recetas en las que las barras del día anterior se utilizan para elaborar sabrosas sopas, dulces sorprendentes o incluso pizzas con una masa diferente a la tradicional.

Pan duro para hacer recetas irresistibles
Pan duro para hacer recetas irresistibles

"El objetivo es, en primer lugar, que la gente no tire el pan o los pasteles que han quedado en casa y que son un elemento básico de nuestra cultura gastronómica", explica Barriga, que además anima a llevar a cabo esas elaboraciones "con ingredientes sencillos" y pensando en los más pequeños de la casa .

Como en otros libros de Barriga ("Pan" o "Bollería"), el volumen reserva un apartado especial con recetas aptas para celíacos o hechas con pan integral ", dirigido también para aquellos que deseen mantener la línea", explica el cocinero.

Pan duro para hacer recetas irresistibles
Pan duro para hacer recetas irresistibles

Como ejemplo de la inventiva de Barriga, aquí está la receta de unas sabrosas croquetas de pan, fáciles de preparar y muy económicas.

Ingredientes

- 250 g de pan sin gluten
- 3 huevos
- 400 ml. de leche
- Queso emmental rallado
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva virgen extra (para freír)

Elaboración

Corta el pan en rebanadas no excesivamente gruesas (te quedará mucho mejor si el pan está duro) y remójalas en la leche durante al menos 30 minutos para que se empapen bien.

Escurre la leche sobrante del pan, pon las rebanadas en un recipiente un poco hondo, añade los huevos y tritura la mezcla con un tenedor. Luego, agrega el queso rallado, la sal y la pimienta y remueve todo el conjunto para que quede homogéneo.

Si ves que está demasiado blando, déjalo reposar en la nevera durante un rato para que adquiera cuerpo. Cuando la mezcla tenga la consistencia adecuada, con la ayuda de una cuchara ve haciendo piezas en forma de croqueta.

Por último, fríe las croquetas en aceite de oliva virgen extra hasta que estén bien doradas por ambos lados. Cuando las saques de la sartén, déjalas sobre un trozo de papel de cocina absorbente para que suelten el aceite sobrante.