Yahoo Estilo Bufandas a la moda: aprende a anudarlas con estilo
Las bufandas no solo sirven para abrigar tu cuello y tu pecho, sino que además ¡le aportan un acento de estilo a cualquier look! Descubre estas cinco maneras de anudarlas como los famosos.
Con un nudo
Hacer un nudo en tu bufanda es ideal para los días algo frescos, ya que protegerá tu cuello del aire frío. Puedes usarla para ir al trabajo por las mañanas o para salir por la noche, si la acompañas de un blazer o una chaqueta de cuero, como Will Smith. ¿Cómo la anudas? Estírala por detrás de tu cuello, dejando un extremo más largo que el otro. Luego, toma el lado con más caída y enlázalo en forma de nudo, dejando que las dos partes se superpongan sobre tu pecho. ¡Lucirá genial!
Como en París
El nudo parisino es una forma muy popular de sujetar las bufandas, y hasta el fotógrafo Karl-Edwin Guerre lo usa para asistir a eventos. Lógralo doblando la tuya en dos para que ambos extremos queden juntos, y enrollándola alrededor de tu cuello. Luego, enlaza las puntas en el orificio que se ha creado, y deja que cuelguen libres sobre tu pecho. ¿Quieres que la bufanda se vea más gruesa, o que te proteja aún mejor del frío? Entonces, dóblala también de forma horizontal antes de atarla. Un tip: si el día está helado, métela dentro de tu chaqueta antes de cerrarla. Así estarás más protegido de las bajas temperaturas.
Sin nudo
Si prefieres tener el cuello más libre, también puedes enrollar tu bufanda bien suelta y dejar que los extremos caigan sueltos por sobre tus hombros, al igual que el modelo Jake Love. De este modo, podrás darle a tu atuendo un toque de moda, sin estar demasiado abrigado. Luce este estilo sobre tu chaqueta sin meterla adentro, para que no añada volumen a la zona del pecho y del estómago.
Más alternativas
También puedes lucir tu bufanda de otras dos maneras bien creativas: la revista masculina GQ recomienda anudarla ¡como si fuese una corbata! Eso sí: para que este nudo quede prolijo y no se vea demasiado abultado, probablemente necesites elegir una prenda de un género más bien fino. Otra forma súper cómoda es atar un extremo con otro, y enrollarla dos veces alrededor de tu cuello dejando el nudo hacia atrás. ¿El resultado? ¡Un abrigo imbatible!
Fuente adicional consultada: portal Ask Men (askmen.com)
