Desterrando mitos sobre la frecuencia sexual

Muchas parejas se preocupan por la frecuencia de relaciones sexuales que mantienen, tratando de equiparar su intimidad con lo considerado "normal" para no sentirse fuera de carrera. Pero, ¿las encuestas realmente describen lo que sucede? Y, por otro lado, ¿una pareja debe guiarse por lo que hacen los demás o por sus deseos y las características de su vínculo?

La regularidad con la que una pareja haga el amor dependerá de lo que ambos sientan

o quieran y también de lo que crean que es lo suficiente y satisfactorio para ellos. Importa desterrar el mito según el cual cuantas más relaciones sexuales se tengan, la pareja se quiere o se necesita más. Simplemente es una cuestión de maneras de pensar que no se relaciona en lo absoluto con el amor que haya entre dos personas.

Tampoco la frecuencia se relaciona totalmente con la edad: muchas parejas, cuyos integrantes tienen 40 años, tienen más relaciones sexuales que otras conformadas por individuos de 30 ó menos años de edad. Lo que une a las personas no es la edad, sino la necesidad que haya entre ellos.

Monotonía vs Frecuencia Sexual

Caer en la monotonía, si conlleva a que una pareja disminuya la frecuencia de sus relaciones, porque de ser divertidas y apasionadas, se convierten en algo tedioso. Para esto la solución es usar al máximo la imaginación en cada encuentro: usar diferentes posturas, hacerlo en lugares diferentes (en la parte trasera del auto, en la cocina, la bañera, o escaparse a algún hotel) y darse tiempo. Pensemos que cuando estamos de vacaciones, la frecuencia muchas veces aumenta porque al estar menos estresados, nos damos más tiempo para los encuentros sexuales, nos amamos lentamente lo cual conlleva a que la experiencia sexual se convierta en algo más excitante y ello a su vez determina que tengamos más ganas de nuevos encuentros sexuales.

Lo que una pareja haga y la regularidad con que lo haga, depende de sus integrantes, no de la sociedad ni de las demás parejas. Hay parejas que piensan que una relación por día es lo ideal, mientras que otras se encuentran satisfechas con un ritmo de cada dos días, semanal o inclusive mensual. Importa desterrar mitos y conversar sobre lo que cada uno desea y no desea realizar con el otro. Importa más la satisfacción que se halla en la experiencia sexual que la cantidad de veces que mantenemos sexo.

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