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¡Basta te tele!: 10 ideas para niños más activos

Texto: Mariana Israel

Tener demasiado tiempo libre tiene sus desventajas. Evitar que los niños se sienten durante horas en el sillón de la tele se vuelve casi una misión imposible. No vamos a recordar las mil y un razones por las cuales es esencial que se muevan, que hagan deporte y que disfruten del aire libre. ¡Sí, vamos a proponerte ideas que los tentarán a dejar el control remoto!

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1- Límites. El primer paso será establecer límites a los horarios permitidos de “pantallas”: esto incluye televisión, tablet, videojuegos y computadora. La Academia Americana de Pediatría recomienda que los chicos no pasen más de 2 horas frente a cualquier pantalla.

2- Saca la tele de su cuarto. Porque, de otra forma, controlar qué ven y por cuánto tiempo, se volverá realmente imposible. Es preferible situarla en un área común de la casa.

3- Antes de prenderles la tele, piensa si es tu mejor opción. ¿No hay otra cosa que puedas hacer con ellos?

4- Desempolva los viejos juegos de mesa. ¿Cuándo fue la última vez que jugaron al Maratón o al Monopoly? ¿O que armaron un rompecabezas de más de 500 piezas todos juntos?

5- “Corta” la luz. Baja el interruptor que da luz al cuarto de la tele y simula un corte de energía. ¿Y ahora? ¡A jugar a la luz de las velas! Cuéntales cuentos de terror, empiecen una guerra de almohadones o salgan a tomar un helado.

6- Invita a sus amigos. Aunque tengas que ordenar el caos posterior, este es un recurso infalible para mantener a los chicos divertidos. Puedes oganizarles una pijamada o un festival de disfraces con tu ropa vieja.

7- Enséñales tu talento. ¿Tocas la guitarra? ¿El piano? ¿Sabes pintar? Contágiales tus pasiones. Puedes ponerles un objetivo solidario; por ejemplo, que tejan ropa para los niños con necesidad o que aprendan una canción en guitarra para ir a tocársela a los ancianos del asilo de ancianos cerca de tu casa.

8- Revivan el placer de leer. Lean un libro, un capítulo cada noche. Pueden turnarse para leer en voz alta y hasta adoptar las voces de los distintos personajes de la historia. Al principio, les va a parecer aburridísimo, pero una vez que se emocionen con el argumento van a cambiar la tele por el libro.

9- Aprendan algo juntos.
El verano es ideal para aprender una actividad en familia: abundan los cursos cortos, de deportes al aire libre como windsurf, kayak, volley o natación. Voten entre todos y anótense en algo que los mantenga afuera de la casa, al menos dos veces por semana.

10- ¡Sí al entretenimiento en vivo! Lleva a los chicos al teatro, al circo o a un concierto infantil. Que disfruten de un buen espectáculo en vivo, sin pantallas de por medio.

… Y, si a pesar de todo este esfuerzo, se aburren, ¡no importa! Hay que aprender a no hacer nada, a tolerar los tiempos muertos y vacíos. Porque allí, donde la mente se serena, aflora la creatividad.

Fuentes consultadas:
Parents.com
Hospital Italiano de Buenos Aires (Hospitalitaliano.org.ar)

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