Señales de ruptura

Las crisis de pareja no se
solucionan en un día. A algunos les tarda meses y hasta años mejorar la
relación. ¿Pero qué pasa con los que no lo consiguen y sienten que el
malestar se ha vuelto crónico? Y no es que no hayan esperado lo
suficiente o trabajado para revertir la situación, es que no lo han
conseguido....

¿Cuándo hay que decir basta? ¿Cómo darse cuenta de
que ya no hay retorno? ¿Cuáles son los signos que adelantan que la
ruptura está cerca?

Porque no se trata de engañarse para evitar
asumir que el plazo ha vencido, aquí van algunas señales inequívocas de
que la relación no va bien:

- Esquivas cualquier oportunidad para hacer el amor
Vivis
sin problemas la abstinencia sexual. Preferis dormir, leer o quedarte
viendo la tele antes que tener sexo. Y si no hay margen para evitar el
encuentro, haces todo lo necesario para que termine cuanto antes. El
sexo se ha vuelto un pesar, una obligación.

- No hay fecha que valga (ni cumpleaños, ni aniversarios....)
Lejos
quedaron los tiempos en los que recorrías shoppings enteros detrás de
su regalo de cumpleaños. Ahora, llega esa mañana que debería ser
festiva, y no hay ningún paquetito especial. Ni siquiera un buen
desayuno. A duras penas, una comida con su familia.

- Se terminaron las mariposas en el estómago
No
hay emociones extraordinarias. No te pones una ropa especial para salir
con él. Ni siquiera te pones celosa al imaginar que pueda estar
engañándote. No te mueve nada.

- Tardas en regresar a casa
Antes
corrías para llegar, lo esperabas con comida casera. Preferías salir
con él antes que con tus amigas. Ahora, el mejor momento del día es el
after hour con tus compañeros de trabajo.

- No atiendes sus llamadas telefónicas
Lees
sus mensajes de texto delante de tus amigas, como burlándote. Sientes
que cada llamado que te hace es sólo una forma de controlarte. La vieja
costumbre de hablar varias veces al día es historia.

- Te gustan otros
Vives
distraída con otros hombres. No puedes dejar de seducir a tu compañero
de trabajo, de estudio o hasta al peluquero. En el fondo esperas que
cualquiera de ellos te ayude a definir lo que no te animas a afrontar
sola.

- Ya no haces planes de futuro
No
hay viajes, mudanzas ni refacciones de la casa en el horizonte. Ninguno
de esos proyectos que solían soñar juntos en voz alta. Se terminaron
los planes armados con entusiasmo para el fin de semana. Sencillamente,
dejaron de hablar del futuro.

- Tiemblas cuando ves que se esfuerza por mejorar la relación
Una
repentina declaración de amor, una invitación a cenar a tu restaurante
favorito, hasta un regalo sorpresa, dejan de ser señales alentadoras.
Todos sus gestos amorosos te agobian. Lo sientes como una presión que
sólo tiende a confundirte.

¿Cómo te das cuenta cuando una relación de pareja se está terminando?