Una artista convierte computadoras en fabulosos insectos
En la vorágine de la era tecnológica puede ocurrir que, de un momento a otro, tu actual teléfono inteligente o tu computadora pasen a ser verdaderos objetos obsoletos. Pues esta idea de desperdicios electrónicos sacudió el mundo de la artista Julie Alice Chappell, que encontró en los viejos dispositivos, un nuevo y original uso.
“Mi trabajo muestra una belleza estética, al tiempo que ofrece un discurso sociopolítico, que apunta a reclamar por los residuos y la destrucción de la naturaleza”, explica la artista en su cuenta de Facebook oficial.
Asocia en sus obras los dos conceptos, la belleza estética y el discurso del que habla, reflejando “los peligros de la obsolescencia programada y los desechos electrónicos en el medioambiente”, declara.
Un nuevo uso para gadgets olvidados
Bajo el nombre de “Insectos de componentes de computadoras”, Chappell le dio vida a esta serie de seres voladores creados, precisamente, con elementos informáticos: “Mi práctica artística consiste en descomponer los materiales preexistentes, reinterpretarlos y ofrecerles una nueva y hermosa forma”, detalló en la revista Permaculture.
Todo comenzó varios años atrás, cuando la artista se encontró con una gran caja de componentes electrónicos diminutos, en la Beneficial Foundation de Portsmouth, Reino Unido: “La llevé a mi casa y, con mis hijos, creamos hormigas”.
Actualmente, Chappell utiliza los recursos que va encontrando en la calle o en terrenos abandonados. Incluso, consigue teléfonos en desuso, teclados y demás productos electrónicos de amigos y organizaciones que apoyan su trabajo, describe en la publicación antes mencionada.
Buscando un hogar para sus insectos
Las obras de Chappell se comercializan a través del portal de ventas online Etsy. Sin embargo, según publica la artista en ese sitio web, todos sus productos han sido vendidos y se encuentra en vías de reponer el stock.
Además, según contó en Permaculture, también busca un lugar físico para sus creaciones: “Mi esperanza es que pronto encuentre un hogar permanente para ellos, posiblemente, en un museo de historia natural”, confesó.
¿Qué te parecen sus insectos?