Siete alergias insólitas

La incidencia de las alergias ha crecido exponencialmente y continúa en aumento. La intolerancia a algunos elementos es cada vez más frecuente y, aunque hasta hace unos años se detectaba a edades tempranas, ahora se manifiestan cuando eres adulto.

Alergia al chocolate / Foto: Thinkstock
Alergia al chocolate / Foto: Thinkstock

Tener alergia significa desarrollar una hipersensibilidad a una partícula o sustancia que, si se inhala, ingiere o toca, produce síntomas y reacciones concretas. Por ejemplo:

  • Urticaria.

  • Comezón en la piel.

  • Dificultad para respirar.

  • Sensación de ahogo.

  • Cólicos estomacales.

  • Dolor de cabeza.

  • Hinchazón de cara, lengua o manos.

Generalmente son de origen hereditario, pero también suelen producirse cuando la persona se desarrolla en ambientes en extremo higiénicos, porque el sistema inmunológico se "distorsiona" al mantenerse libre de bacterias.

Son comunes las alergias a ciertos alimentos (chocolate, frutas, pescado), al polen, a los ácaros del polvo, las picaduras de insectos y al pelo de animales. Sin embargo, hay muchas otras que resultan extrañas y sorprendentes.

1. Urticaria solar o alergia al sol. Una mínima exposición a la luz solar puede provocar ronchas y quemaduras, además de mareos, ahogo, dolor de cabeza y síncope (desmayo). No es hereditaria ni existe un grupo con una tendencia mayor a desarrollarla.

Un primer brote puede ser la aparición de granos en zonas expuestas al sol, como la cara o el escote. Para evitar su aparición se recomienda aplicar fotoprotectores de índice alto. Según el Dr. Ricardo Ruiz Rodríguez, del departamento de Dermatología de la Clínica Ruber en Madrid, el tratamiento varía según la extensión de los síntomas. ¿Cómo combatir este problema?

Requiere corticoides tópicos de baja o moderada potencia o antihistamínicos orales, que deben ser prescritos por un especialista. También puede resultar útil empezar un mes antes de las primeras exposiciones a la temporada más soleada con la toma diaria de compuestos que contienen sustancias fotoprotectoras con efecto antioxidante; por ejemplo, los carotenos, que se hallan en las frutas y vegetales de color oscuro (moras, betabel).

En casos más severos o crónicos puede estar indicado un tratamiento "desensibilizante", que consiste en administrar dosis bajas de radiación ultravioleta en una cabina médica, al menos un mes antes de las primeras exposiciones del verano.

2. Urticaria acuagénica o alergia al agua. Sólo la padecen 30 personas en todo el mundo, es decir, una persona por cada 230 millones. Un breve contacto del agua, a cualquier temperatura, puede generar ronchas o placas eritematosas y edematosas de diferente tamaño. Esta alergia dificulta la higiene personal e interfiere en la alimentación. ¿Se sabe cómo combatirla?

Se recomienda tomar duchas breves, de menos de un minuto, y tratamiento con antihistamínicos. Esto es lo único que puede hacerse puesto que no se conocen sus causas ni tampoco su cura.

Dificulta la higiene personal / Foto: Thinkstock
Dificulta la higiene personal / Foto: Thinkstock

3. Urticaria a frogore o alergia al frío. Es una reacción ante la exposición a estímulos fríos: viento, bajas temperaturas, lavado o inmersión en agua fría, contacto con objetos fríos o ingestión de bebidas o alimentos fríos.

Aunque puede aparecer a cualquier edad, es más frecuente en adultos jóvenes. Se manifiesta con brotes agudos de ronchas rojizas en la piel que producen picor, fiebre, malestar general, dolor de cabeza, abdominal y de articulaciones, entre otros. ¿Cómo controlarla?

El uso de antihistamínicos puede aliviar los síntomas, pero no previenen futuras reacciones. También se utilizan tratamientos de inducción de tolerancia al frío, en los que gradual y progresivamente se expone al paciente a bajas temperaturas.

4. Alergia al semen. Se desarrolla en el cuello de la matriz de algunas mujeres (afecta al 5% de ellas), pero no causa síntomas alérgicos comunes, sino que el fenómeno es interno y silencioso. No obstante, algunas mujeres experimentan desde picores hasta un choque anafiláctico, es decir, una serie de complicaciones que ponen en riesgo la vida (asfixia, baja de la presión arterial). Incluso ha habido casos de hombres que también son alérgicos a su propio esperma. Es difícil de diagnosticar, porque puede confundirse con infecciones o con otras enfermedades de transmisión sexual. ¿Puede remediarse?

Tener más sexo, mínimo 2 veces a la semana, para reducir la sensibilidad femenina, podría disminuir esta afección. Otro tratamiento es aplicar semen diluido en la vagina cada 20 minutos e incrementar la concentración de esperma en dicha solución al paso de las siguientes dosis.

La más dulce cura / Foto: Thinkstock
La más dulce cura / Foto: Thinkstock

5. Alergia a las vibraciones. Las que producen el movimiento de un barco o un coche provocan alteraciones en el sentido del equilibrio, lo cual marea, causa vómitos. Las vibraciones de media y alta frecuencia dañan la columna vertebral y trastornan el aparato digestivo. Además, producen quemaduras por rozamiento y problemas locomotores. ¿Cómo evitarla?

Las vibraciones transmitidas a manos y brazos provocan problemas vasculares, impactos de distinto nivel en huesos o articulaciones y dolores musculares o tensión nerviosa. Para evitarlo se debe reducir al máximo la duración e intensidad de la exposición, además de elegir un equipo de protección individual adecuado al trabajo que se esté realizando.

6. Alergia al ejercicio. La produce la actividad física u otro agente que hace reacción con el movimiento del cuerpo. En la mayoría de los casos puede ser desde la comida ingerida, el alcohol o el clima del lugar donde se practica la actividad. Puede ocurrir durante o después del ejercicio. ¿Es controlable?

Sí, es posible controlar la mayoría de sus síntomas tomando el medicamento que prescriba el especialista y desacelerando o interrumpiendo el ejercicio tan pronto como los estragos comienzan. Además, es recomendable hacer ejercicio con un compañero que conozca tu condición y llevar un registro de lo que se come antes de hacer ejercicio para que el médico pueda identificar qué sustancias desencadenan una reacción alérgica.

7. Dermografismo o alergia a la presión. Es un tipo de hipersensibilidad relacionado con cualquier golpe o presión que se haga sobre la piel, lo que generalmente se manifiesta con manchas o urticaria. También puede provocar una hinchazón exagerada y visible en el cuerpo debido a la vasoconstricción. Se detecta mediante un test en el cual se aplica un peso de 10 kilos sobre los hombros, mientras el paciente camina durante 20 minutos. Y tú, ¿a qué tienes alergia?

Aparece irritación al mínimo roce / Foto: Thinkstock
Aparece irritación al mínimo roce / Foto: Thinkstock

Fuente: Yahoo! España

Las siete alergias más raras / Por Mónica De Haro

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