Ejercicios para mantener el pecho firme y estético

Los senos son una parte fundamental del organismo femenino, por ser el medio para alimentar a los bebés y por tener funciones estéticas y sexuales que los convierten en uno de los atributos más atractivos de la mujer.

Ambos órganos se ubican justo encima de los músculos pectorales de la pared torácica que cubre las costillas, y están constituidos en su mayoría por tejido graso y fibroso, que les proporciona el soporte adecuado. Debido a que los senos no están anclados a ningún músculo ni al tórax, su firmeza depende de la contención proporcionada por la piel.

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Existen diferentes causas por las que el pecho pierde firmeza: el paso del tiempo, la gravedad, múltiples embarazos, cambios hormonales, periodos prolongados de lactancia, cambios bruscos de peso corporal, sedentarismo, etc. Si bien no hay métodos o formulas que puedan incrementar su tamaño, puedes prolongar su “firmeza natural” realizando 5 sencillos pero efectivos ejercicios caseros, además de los cuidados especiales que debes tener. Lo ideal es realizar 3 a 4 series de 20 reps por cada ejercicio, al menos 3 veces por semana. Si nunca has hecho ejercicio, puedes comenzar con 2 series de 10 reps. Piensa que de nada te sirve estar un mes trabajándolos para después dejarlos. Debes hacerlos un hábito que realizarás casi diariamente.

El muro: parada frente a la pared, separa tus manos un poco más abiertas que el ancho de tus hombros. Empuja fuerte la pared como si quisieras moverla; sostén la contracción del pectoral y brazos por 5 segundos y descansa 1 segundo. Ejecuta seguidas 20 reps.

Cristos con mancuernas: acostada boca arriba en un banco o en el piso, toma un par de mancuernas (o botellas con agua) y extiende tus brazos por encima de tu pecho con las mancuernas juntas. Baja tus brazos con el peso en las manos, simulando que abres un abanico hasta poner tus brazos paralelos al piso. Mantén ligera flexión de los brazos al bajar; sube el peso al punto inicial con brazos extendidos enfocándote en el pectoral y repite el movimiento 20 veces continuas.

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Manos encontradas: coloca tus palmas de las manos juntas a la altura del pecho como si estuvieras rezando. Eleva tus codos a la altura de los hombros y presiona fuerte por 5 segundos sin movimiento para relajar un segundo. Realiza tus 20 repeticiones continuas.

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Contracciones cerradas: coloca tus manos a la altura de los hombros frente al tórax pero con puños cerrados. Ciérralos para simular que abrazas un balón colocado en tu pecho; sostén la contracción fuerte por 5 segundos y abre brazos hacia atrás para relajar un segundo. Repite 20 veces.

Flexiones tipo lagartijas: acostada boca abajo, apoya tus manos en el piso por afuera del ancho de tus hombros con brazos extendidos. Ya sea que apoyes las puntas de los pies en el piso o tus rodillas, baja el torso en dirección al piso. Cuando tu tórax esté a un puño de separación del piso, sostén la contracción entre 1 y 2 segundos para regresar al punto inicial. Repite 20 veces… Si te parece difícil hacerlas seguidas, puedes realizarlas de 5 en 5.

Como complemento a lo anterior, mantén un estilo de vida saludable donde puedas:

• Cuidar tu alimentación

• Realizar cardio ( natación, elíptica, caminata, etc) 40 minutos, 3 veces por semana

• Evitar el cigarro

• Descansar lo suficiente

• Realizarte un chequeo médico por lo menos dos veces al año

En mujeres jóvenes estos consejos pueden dar muy buenos resultados a largo plazo y aminorar la caída inevitable y normal del pecho. Consúltalo con un médico especialista.

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José Manuel Nava es Lic. en Educación Física (ESEF), especialista en Fitness y multideporte