Las hormonas de los hombres también cambiarían con la paternidad

Las hormonas de los hombres también cambiarían con la paternidad

“Estamos embarazados” podría ser más que la expresión de lo que siente una pareja que espera un bebé. La ciencia encontró que los hombres también sufrirían cambios hormonales con la paternidad, incluso desde los primeros meses del embarazo, de acuerdo con un estudio. Así que si estás en la dulce espera, no te sorprendas si tu pareja sale a comprar un helado de fresa y chocolate a las dos de la mañana… ¡para él!

Ser padres los cambia ¿más de lo que crees? Foto: Thinkstock.
Ser padres los cambia ¿más de lo que crees? Foto: Thinkstock.

Las hormonas “paternas”

Embarazo y revolución hormonal estuvieron vinculados desde siempre. En la mujer, claro. Pero ahora, se descubrió que los futuros padres también experimentarían ciertas modificaciones en sus niveles hormonales, según una investigación publicada en diciembre de 2014 en la revista científica American Journal of Human Biology.

Para llegar a estas conclusiones, investigadores de la Universidad de Michigan tomaron muestras de saliva de 29 parejas que esperaban su primer hijo, para medir sus niveles de testosterona, cortisol, estradiol y progesterona en las semanas 12, 20, 28 y 36 de embarazo.

Mientras que todas estas hormonas se habían elevado en las mujeres, los hombres presentaban una disminución de la testosterona –asociada con la agresividad– y del estradiol, vinculado con el cuidado y la unión. No se observaron cambios significativos en ellos con respecto al cortisol, hormona del estrés, o la progesterona, asociada a la conducta maternal.

Preparación y cambios

“Todavía no sabemos exactamente por qué cambian las hormonas de los hombres”, admitió Robin Edelstein, autora principal del estudio, en un informe de prensa de la Universidad de Michigan. “Podría relacionarse con los cambios psicológicos que experimentan los hombres que se preparan para ser padres, los cambios en sus relaciones de pareja, o incluso los cambios físicos que experimentan junto a sus parejas embarazadas”, estimó la profesora asociada de psicología.

Lo que sí es seguro, según Edelstein, es que estas variaciones podrían tener importantes efectos en el comportamiento paterno una vez que el bebé nace.

Una limitación del estudio es que no hubo un grupo “control” de hombres que no estuviesen esperando un hijo, para contrastar los resultados. Por esto, la experta confesó que no pueden descartar completamente que los cambios se deban, por ejemplo, a la edad o al paso del tiempo.

Cuando nace el bebé

No es el único trabajo que ha relacionado la paternidad con el descenso de la testosterona. Una vez nacido el bebé, esta hormona bajaría aún más, según otro estudio publicado en 2011 en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences.

En este caso, los investigadores evaluaron a 624 hombres filipinos durante cinco años, antes y después de ser padres. Concluyeron que esa reducción de la testosterona podría hacer que se volvieran más propensos a quedarse cerca y a cuidar de su familia. Los voluntarios que estaban más involucrados en el cuidado de sus niños mostraron niveles particularmente reducidos de la hormona.

La novedad del estudio de la Universidad de Michigan es que ha sido el primero en señalar que estas variaciones hormonales podrían comenzar incluso antes del nacimiento. ¿Quién dijo que ellos no se “embarazaban”?