Vestir elegante podría aumentar tu creatividad

Puede que en más de una oportunidad hayas escogido un atuendo chic y acorde a una reunión importante o entrevista laboral. Pero, ¿alguna vez creíste que, más allá de cómo te ves, tu elegancia al vestir, podría impactar en tu personalidad y en tu desarrollo?

Pues, según un reciente estudio publicado por la revista Social Psychological and Personality Science, las personas que visten elegante tendrían la capacidad de modificar su propia forma de pensar y desarrollan ideas, al punto de convertirse en seres más creativos.

¿Cómo sucede?

La investigación, que fue llevada a cabo por un grupo de estudiosos de la Universidad de Columbia en Nueva York, Estados Unidos, y de la Universidad Estatal de California, en Northridge, contó con cinco estudios para probar que, de acuerdo a la forma en que vistes, el cerebro procesaría los datos que recibe de un modo en particular. Así, según el estudio, se pudo establecer que existirían dos formas de realizar este proceso:

- Procesamiento abstracto: concibe la información de manera “holística” y amplia.

- Procesamiento concreto: concibe la información de manera subordinada, estrecha, acotada.

Entonces, se llegó a comprender que el uso de prendas formales fomentaría este procesamiento abstracto y, por ende, el pensamiento global, integrador y total ante cualquier información: “La gente de pensamiento abstracto es más propensa a considerar ejemplares débiles, como buenos ajustes a categorías. Como por ejemplo, un camello es visto como un modelo apropiado de un vehículo”, detallan en el informe.

Descifrando la forma de vestir

Además de hablar sobre la forma de procesar la información, se estableció una relación interesante en cuanto a las prendas informales, en contraposición con las formales: “El uso de indumentaria sobria se asocia con la percepción de un mayor profesionalismo, pero también de una menor accesibilidad”, describen los autores en el estudio en la fuente antes mencionada.

Del mismo modo, explican: “Las prendas ocasionales, en cambio, están relacionadas con la intimidad y la familiaridad. Incluso, las personas que usan las formales se ven a sí mismas como más competentes y racionales, mientras que las que llevan las informales se describen como amigables y relajadas”.

Y ellas, ¿qué opinan?

“Al vestir elegante me siento más poderosa, con mayor capacidad de desempeño. Me ubica en una posición diferente y siento que mis compañeros me respetan más”, cuenta Sofía, analista de Trade Marketing de 29 años, a Yahoo.

Por otro lado, María Eugenia, diseñadora gráfica de 31 años, comenta: “Si tengo que asistir a una reunión, sin duda elijo la ropa apropiada y no siempre es la más formal: muchas veces hay que adaptarse al contexto y eso implica también elegir algo casual”.

Y tú, ¿cómo te sientes cuando vistes elegante? ¡Comparte tu experiencia!

Entrevistas a Sofía, analista de Trade Marketing, 29 años y María Eugenia Fernández, diseñadora gráfica de 31 años.

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