¡Shakira, Shakira!: la sonrisa no miente

Una camioneta marcha a una velocidad de 60 kilómetros por hora. Voy en el asiento de atrás y mi corazón late a mil. El recorrido comenzó desde Casa Fouster, un hotel digno de cuento de hadas ubicado en la calle de Passeig de Gràcia en Barcelona, España. El chofer ha tomado la autopista C-32 en dirección a Girona. Después de varias maniobras toma camino hacia Granollers. Miro por la ventana y veo como se mezclan el azul del cielo y el mar Mediterráneo.

Una sensación de bienestar me invade. Es un día genial para Yahoo De Moda. Después pregunto a la gente que va conmigo si falta mucho para llegar a nuestro destino: Bell Recó (Bello Rincón, en catalán); una mansión soberbia situada en el Vecindario de Pins. En ese elegante recinto rodeado por un jardín de 5000 metros cuadrados voy a reunirme con una mujer que desborda talento, tiene una belleza genuina, caderas perfectas, estilo fresco y que es reconocida por ser una filántropa, embajadora de buena voluntad para Unicef y quien actualmente es la spokesperson de Oral - B. Sí. Voy a reunirme con Shakira.

Tras una hora de camino, la camioneta para y anuncia la llegada. Charlo con colegas de otras nacionalidades que derrochan glam. Long Champ, BCBGMAXAZRIA, Armani y otras firmas de diseñador engalanan los cuerpos de quienes también están ávidos por ver a la mamá del pequeño Milan y pareja de Gerard Piqué.

Entro a la casa de 1500 metros cuadrados y aguardo en una sala. Después de un rato, llega la hora. Shakira aguarda en uno de los salones de la casa. Entro con paso firme y decidido. Es ahí donde la fantasía comienza a tomar forma.

“Oh my Dior, ¿me la han cambiado?”, es lo primero que pienso cuando la miro detenidamente. Es aún más linda y delgada que en la pantalla o en los conciertos en la que la he visto. Sus brazos extremadamente torneados y delgados, su cintura breve, cabellos perfectos y un estilo muy femenino. Pareciera irreal. Lleva unas botas negras a la rodilla de plataforma y tacón de aguja que la hacen ver todavía más estética. Un vestido en color rosa ajustado, perfecto para esta temporada de otoño.

¿Su make up? Un sueño. Ella se maquilla de una forma muy natura: un poco de polvo traslucido, blush, sombras y lápiz labial en color rosa. Cejas torneadas y espesas y un perfume que huele a caramelo.

Shakira saluda con una sonrisa y suelta una carcajada muy sincera. “Hola… Yahoo... De México. ¿Verdad? ¿Vamos a hablar en español? Vale. Jajaja”, dice la originaria de Barranquilla, Colombia, muy feliz de poder platicar en su idioma.

“Sí es ella, esa sonrisa tan natural y esa voz la reconozco. No me han timado, no me la cambiaron”, pienso mientras correspondo a la sonrisa de quien ahora es la embajadora de la nueva campaña 3DWhite de Oral - B, bautizada como ‘La historia de la sonrisa de Shakira’, una campaña inspirada en quién es y qué representa ella, así como el poder y la belleza de su sonrisa y que ha sido representada en un cortometraje que detalla el viaje de Shakira como artista, filántropa y amiga.

Y eso es lo que Shakira es para su público, para los periodistas y la gente que la rodea: una amiga. Una persona cercana, una mujer aguerrida, una chica de carne y hueso, un espíritu libre y con un estilo muy original. No es una presa de la moda, sino una mujer que impone moda. Un alma que viaja por el mundo bailando, cantando, sonriendo y mostrando una belleza natural.

Después de esbozar esa sonrisa tan natural, hablar de la campaña y de decirme que se siente supercontenta por ser la spokesperson de Oral – B, bromeamos sobre sus fans y los corazones que quiebra a su paso sin saber. Entre ellos el de mi papá.

“¿En serio? ¡Wow! Muchas gracias por contarme esto, algún día conoceré a mi noviecito mexicano. Salúdame a tu papá y me le mandas un besito. Muchas gracias”, me dice y vuelve a sonreír, al tiempo que pone una de sus finas y bien cuidadas manos sobre su pecho. En seguida, le pregunto qué es para ella realmente lo que la hace sentir cómoda, bella y con ganas de sonreír.

“Yo creo que tener un cariño por la gente también. Yo siento que quiero a la gente y creo que uno no recibe lo que no da. Entonces, me parece que la relación que tengo con mi público, ha sido una relación de darles mucho y también ha sido reciproca porque he recibido tanto de ellos, de mis fans, de la gente que he conocido, que conoce mi música. Y siento que hay, hay un sentimiento tan profundo. Mutuo. Saben exactamente lo que pienso, lo que me gusta y al final, me he sentido muy acompañada en mi carrera con un grupo de gente que me conoce bien. Esto me hace sentir cómoda y me hace sonreír mucho, jejeje, porque ahí están todos sobre el escenario. He tenido momentos espectaculares, momentos inolvidables, de cantarle al público, de sentir que cantan conmigo, de ver mis fans de toda la vida, de gira tras gira, año tras año están ahí y no se han ido. ¿Sabes? Con una lealtad muy profunda. Si que me hace sentir muy cómoda y me hace sonreír”, dice con un tono que denota sinceridad absoluta", platica la talentosa cantante de 36 años.

Después, habla de esa una personita que la hace sentir más bella cada día y la hace carcajearse. Habla de ella con tal emoción que la intérprete de ‘La tortura’ se ve aún más linda, pues ha llegado a sonrojarse. Por supuesto, habla de su pequeño.

“¡Milan!, ¡Milan!, ¡Milan! (dice muy emocionada y se carcajea). A veces se me viene así encima y me da unos besos y me come la nariz y se me…me… me… se me pone como una ventosa en toda la boca. Me da unos besos inceíbles. Me hace reír. Sus dos dientecitos. Es que… ¿sabes? Tiene ya dos dientecitos, así. Muy 3DWhite. Son los únicos dos dientes que tiene. Es supertierno cuando ríe, hace unas caras muy graciosas. También me hace reír. Hace muchas cosas”, dice y ese rostro suave y juvenil se tiñe un poquito más.

Claro que Shakira no solo admira la sonrisa de Milan. También habla de otras sonrisas que califica como “grandes y verdaderas”.

“El secreto de una gran sonrisa es ser desinhibido, abierto y sincero. Yo creo que las personas que sonríen de oreja a oreja son gente que no miente. Es gente genuina o al menos muestra ser genuinos y yo creo que eso es apreciado por los demás. Como mi suegra. Bueno, no lo es porque aún no estoy casada, pero es la mamá de Gerard. Ella sonríe de oreja a oreja! Y es una sonrisa tan bella, honesta, linda, atractiva, que la hace tan cercana. Es fácil acercarse a ella”, cuenta mientras juega con sus manos. Cada que toca un tema familiar se emociona tanto.

La moda de los ‘Pies Descalzos’

Después de confesar el secreto que la hace lucir siempre bella y sonriente, así como definir lo que es para ella una verdadera sonrisa, mi curiosidad invade el salón y le pregunto por qué esa genuina moda de los pies descalzos durante sus conciertos. Y si es realmente una pasión andar descalza.

“Sí, sí. Siempre ando descalza. Toda mi vida anduve descalza. Crecí en un barrio en el que también andaba también descalza por ahí. Nunca me veían con zapatos. Siempre, se reían mucho de mí los vecinos porque andaba sin zapatos. Me gustaba andar sin zapatos por ahí. Si tenía que ir a la tienda a recoger una cosa, a comprarme alguna chuchería iba sin zapatos. Siempre me sentí, me he sentido libre. Ha sido mi forma de ir despreocupada por la vida, al menos en algunos aspectos. ¿No? Sentir que mi espíritu no tiene, que no estaba dispuesta a construirle como una cárcel a mi espíritu. Era como una especie de metáfora yo creo, y de ahí vino mi álbum “Pies descalzos”, mi filosofía de vida, mi fundación. Entonces, siempre ha sido como un símbolo que me ha representado. Y por eso me gusta andar descalza en el escenario, además que es muy cómodo para bailar.

-¿No te gustan los zapatos?- , le digo con tono bromista y ella me sonríe. Después le pregunto cuáles son sus favoritos, ya que estoy segura que las lectoras de YahooDe Moda mueren por saberlo. Y yo también.

“Cualquiera que tenga plataforma porque como estoy con un hombre que mide 1.95, pues… (risas)… Y bueno, pues ir descalza por la vida, pues tampoco es una opción. Pero en casa sí que ando descalza todo el tiempo. Y a veces hasta por la calle”, cuenta la mujer que en esta ocasión luce unas botas muy roqueras de plataforma y tacón de aguja.

En seguida, el tema vuelve a girar en torno a la mujer aguerrida, bella, a la moda y talento. La mujer latina.

“Todas las mujeres, las latinas, somos muy recursivas. ¡Eh! Quizá porque nos ha tocado duro. Quizá porque no es tan fácil vivir en las sociedades de países en desarrollo. Siempre tenemos que tener ese instinto de supervivencia. Creo que ese instinto de supervivencia me ha servido en mi carrera, en la industria de la música, en este mundo de hombres en el que me muevo, me he movido. Pero creo que, yo tengo mucha fe en el ese espíritu aguerrido. Tú usaste esa palabra y me gusta mucho. El espíritu aguerrido de la mujer hispana porque hemos pasado muchísimas dificultades. Sabemos cómo salir adelante, cómo llevar adelante una familia, a veces familias con bajos recursos y sobrevivimos, sobrevivimos las dificultades. Creo que ese es el espíritu, el espíritu latino por excelencia. ¿No? El que es así, es aguerrido y que es recursivo, además”, comenta la embajadora de 3DWhiteSmile, a quien su gente apura.

Cabello hermoso, piel de seda y rostro natural

Ella hace una seña para poder continuar. Entonces, nos habla de la moda de los cambios de cabello (del negro azabache, de las trenzas, del color rojo y del rubio), así como de la piel y del cuidado personal.

Trato de no utilizar los productos con alcohol porque… ya sabes, secan tu cabello. Uso aceites naturales, pues los cabellos rubios de verdad los necesitan. Mi cabello necesita mucha nutrición. He tenido todos los malos... Mi cabello tiene su historia de lágrimas y sudor, pero te sobrepones. Y claro, uso un producto colombiano para cuidar mis rizos. Mis rizos son naturales. Ese producto es especial para un cabello de este tipo y no he encontrado nada mejor que eso.

Después habla de cómo logra mantener una piel suave y regia.

“Mi secreto es no fritearme bajo el sol. Eso de fritearse bajo el sol para obtener un bronceado de envidia… la verdad que no, no vale tanto la pena, porque quedas muy bonita, muy morenita por una semana, pero luego todo un año quedarse al pie del sol es muy destructivo. Entonces, algo que siempre uso es bloqueador solar. Y claro, pongo azúcar a mi crema humectante. La uso en la piel de vez en cuando para remover la piel muerta”, confiesa la pareja del futbolista Gerard Piqué.

¡Fuertes confesiones!

En el salón, donde ahora también se encuentra mi compañera Joanna Douglas de Yahoo Shine, al fin llega el momento de preguntarle al ícono de talento, belleza y moda cuál ha sido el outfit que jamás ha olvidado por ser un desastre de moda. Mi colega y yo hacemos la misma pregunta mientras reímos con Shakira, a quien en esta ocasión le hemos puesto un diez por su impecable look.

“Hay cosas que jamás debí haber utilizado sí me acuerdo”, cuenta tímidamente. Su mirada se entorna y se remonta a uno de sus peores looks:

“Recuerdo unos shorts rojos con barbas negras de piel que usé cuando tenía como 14 o 15 años. Fue para un show de tele. Y una chamarra de piel con estos mismas barbitas. No fue mi mejor imagen... La chamarra también era roja. No. No. Eso no era una buena imagen”, dice sin avergonzarse.

Y es que así es Shakira, Shakira. Una mujer que me ha comprobado que no solo ‘las caderas no mienten’, sino que una persona de espíritu libre, aguerrido y sonrisa a flor de piel, tampoco.

El tiempo ha terminado. Shakira debe salir a un evento. Antes de despedirse se toma una foto con Joanna y conmigo. “Genial, genial, genial”, escucho decir a alguien con emoción. La voz pertenece a una de las personas que acompaña a la esbelta cantante a otra sala de Bell Recó para seguir contando la historia de su sonrisa.

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