Modales en el salón de belleza y el Spa

Si estás planeando una visita a un Spa o al salón de belleza y no eres exactamente una habitué, seguramente querrás saber ciertos códigos que las clientes frecuentes suelen manejar a la perfección. Desde cuánto dejar de propina hasta si debes depilarte antes de una sesión de masajes, estos secretos te permitirán enfrentar a estilistas, terapistas y manicuristas con naturalidad y distensión.

Hay códigos para todo. Para la propina, para explicarle al estilista cómo queremos el corte o el peinado, para la forma de tenderse en la mesa de masajes y para dejarle saber a la especialista que no queremos que nos hablen. Veamos caso por caso:

Cuando de propinas se trata

A la hora del famoso tip o propina, la primera pregunta que nos surge es a quién se la dejamos, ya que la mayoría de las veces nos atienden varias personas. Las reglas generales dicen que los destinatarios son quienes lavan el cabello, el colorista, el estilista que corta y el peina y la manicurista. No es necesario dejar propina a recepcionistas, camareros o dueños de salón. Puedes darle el dinero a cada persona en la mano o dejarlo en la recepción.

Acerca de cuánto dejar, se recomienda un 15 o 20% de lo que te cueste el servicio completo.

A la hora de depilarse

Cuando de depilación se trata, a veces un exceso de pudor o no llamar a las cosas por su nombre puede hacernos actuar de manera incorrecta o, lo que es peor, granjearnos un mal momento. Si quieres un Brazilian Bikini dilo en el momento de hacer la cita, pues hay especialistas que se dedican sólo a esto.

No te recortes el vello ni te rasures antes de depilarte, por más desprolija que te sientas. La especialista sabrá qué hacer en cada caso. Además, un vello que tiene menos de un cuarto de pulgada es muy difícil de quitar. Y para asegurarte un procedimiento rápido y efectivo, sobre todo si te estás depilando el área del bikini, se recomienda quitarse la ropa de la cintura para abajo.

En el salón de belleza

Antes que nada, sé honesta acerca de tu presupuesto. Si no puedes ir al salón muy seguido, díselo al estilista para que la transformación que te haga sean de bajo mantenimiento y puedas hacer tú misma los retoques en casa.

Di exactamente qué es lo que quieres, pero con el respeto suficiente y
cuidando de no herir la sensibilidad del profesional. Escúchalo con
atención y déjate aconsejar, aunque luego tomes tus propias decisiones.

En el Spa

1- Tratamientos faciales: Pregúntalo todo acerca de los productos que te van a aplicar en el rostro, asegúrate que no son dañinos para tu tipo de piel y, si tienes piel sensible, acláralo de entrada. Si quieres un tratamiento tranquilo, dile a la especialista que prefieres relajarte y no conversar; pero hazlo de manera elegante, al principio del tratamiento y no en el medio de la charla.

Si sientes que te quieren empujar a comprar los productos luego del tratamiento, una salida polite es decir que primero quieres ver cómo reacciona el tratamiento en tu piel y luego tomar la decisión.

2- En la sala de masajes. Si no te sientes cómoda con un terapista hombre, solicita una mujer en el mismo momento de hacer la cita. No es necesario que te quites toda la ropa, a menos que te hagas un masaje de cuerpo completo. Antes que nada debes sentirte cómoda y relajada, así que tú determinas el porcentaje de ropa que te quitas o te dejas.

Tampoco es necesario que te disculpes si no te hiciste los pies o no te depilaste. El terapista estará concentrado en tu relajación más que en cualquier otra detalle, así que puedes olvidarte del tema y sólo disfrutar.

3- En saunas, salas de relajación y jacuzzis. El celular es el adminículo "anti-spa" por excelencia, así que será mejor que lo dejes en tu locker. Si vas a conversar en una sala de relajación, hazlo en voz muy baja, pues puede molestar al resto de los clientes, y usa siempre una bata sobre tu traje de baño.

Cuando entres al jacuzzi, puedes hacerlo en traje de baño, lo mismo que si vas al sauna, aunque en este caso también puedes usar sólo una toalla alrededor de tu cuerpo. Asegúrate muy bien del código de vestuario y de las reglas del Spa, ya que algunos no aceptan trajes de baño en estas áreas.

QUEREMOS SABER DE TI: ¿Eres una experimentada en Spas y salones de belleza? ¿Qué otros tips puedes compartir con nosotras? ¡Escríbenos más abajo!