Cocina impecable por menos dinero y sin daños al planeta

Por Griselda Genero

Una de las verdades inevitables de nuestras vidas es que la cocina debe estar limpia en todo momento, no sólo porque allí preparamos nuestros alimentos sino también porque es el corazón de la casa. Y que no haya suciedad a la vista, manchas, moho o grasa, no quiere decir que las bacterias no estén de fiesta, sobre todo en un sitio tan transitado como este. La buena noticia es que podemos hacerlo de una forma fácil, sin gastar demasiado dinero y con productos que no dañan el ecosistema.

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¡Toma nota de estos consejos!

1- Adiós a las viejos mitos

Aquella idea de que si no huele a cloro no está limpio, hoy pertenece al pasado, sobre todo cuando muchas mujeres estamos asumiendo mayores responsabilidades hacia nuestro planeta. Otra vieja creencia es que los productos más efectivos son los más costosos. La realidad es que tu cocina puede verse y estar impecable sin necesidad de desembolsar grandes sumas de dinero y sin dañar el medioambiente, con las fórmulas caseras de nuestras abuelas o valiéndote de un simple paño con agua caliente.

2- Limpia tu cocina... ¡de productos tóxicos!

Si bien el amoníaco y el cloro son perfectos para desinfectar y limpiar, pueden ser muy perjudiciales para tus ojos, tu piel y tu sistema respiratorio, además de causar reacciones alérgicas en determinadas personas. Pero más allá de dañar tu salud, al ser desechados estos productos ingresan en los sistemas de suministro de aguas y cloacas, y pueden terminar en ríos, lagos y océanos, afectando así la vida silvestre.

3- Tu cocina está llena de limpiadores naturales

Es muy probable que tengas ingredientes básicos en tu cocina, que puedes utilizar como para preparar productos de limpieza caseros. Por ejemplo: bicarbonato de sodio, vinagre blanco, aceites de plantas aromáticas como eucaliptus o lavanda, limones, aceite de oliva, habones líquidos herbales (plant based liquid soap), enter otros.

4- Un limpiador casero para restregar

Combina bicarbonato de sodio con jabón líquido a base de hierbas hasta formar una pasta. Unta la preparación sobre un limón cortado por la mitad y restriégalo sobre superficies para eliminar la suciedad adherida. Luego, retira con un paño húmedo.

5- Prepara un desinfectante para el piso

Combina unas cucharadas de jabón líquido herbal, la misma cantidad de vinagre blanco, un galón de agua y unas gotas de aceite de plantas aromáticas. Limpia con un trapo o mop como lo harías con los desinfectantes comunes, y ventila la habitación para deshacerte del olor a vinagre, si lo hubiese.

6- Compra productos ecológicos

Si eres de las que aún prefieres los productos comerciales, es mejor comprar menos cantidad, pero que éstos no afecten al planeta. La particularidad de los llamados productos green es que no contienen compuestos químicos tóxicos, muchos de ellos son orgánicos y biodegradables, incluyendo sus envases.

En el mercado encuentras una gran variedad de marcas de todo tipo de precios: Method, Green Works, Meyers, Seventh Generation, Shalee, Nature's Source, como los más conocidos. Aquí tienes algunos, además de las versiones ecológicas de marcas tradicionales como Clorox.

Volver a lo básico

A veces, un paño, una esponja y un poco de agua caliente pueden hacer el trabajo de toda una artillería de productos de limpieza. ¿La clave? Saber esperar. Deja toda la noche una fuente de horno con restos de comida adheridos y los despegarás fácilmente en la mañana. Pon una esponja embebida en agua tibia sobre una mancha rebelde en la superficie de tu cocina eléctrica, y se aflojará en una o dos horas.

Pon en práctica estos consejos y vuelve a la limpieza de nuestras abuelas. Tu familia, tu bolsillo y el planeta te lo agradecerán.

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