Piercing bucal, moda problemática

Usar un piercing en la lengua, labio o frenillo es una moda que al paso de los años ha ido ganando preferencia entre los jóvenes, pero también podría provocar problemas bucodentales.

Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos, (URJC) en Madrid, realizaron un estudio en el cual advirtieron que la mayoría de las personas que siguen esta tendencia, tarde o temprano sufre alguna complicación. Por ejemplo: inflamación, dolor, dificultad para hablar y masticar, disgeusia (alteración del gusto), sangrado, hipersialia (aumento de la salivación), parestesia (hormigueo) y alergias.

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También, notaron que en los tejidos duros, es decir, directamente en las piezas, aparecían:

• Fisuras (fracturas del esmalte dental)

• Abrasiones (desgaste)

• Pigmentaciones

• Y en tejidos blandos, parte interna o externa de boca, se manifestaban:

• Impronta (marca de la perforación)

• Depilación (daño de las papilas gustativas)

• Cicatrización queloide (crecimiento de tejido cicatricial)

• Úlcera

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Además, se descubrió que 41% de los usuarios de piercing sufren gingivitis, sangrado y mal aliento. La trascendencia de esta moda no parece tener fin. Si estás pensando en colocarte uno de éstos, asegúrate de acudir a establecimientos certificados por las normas de salubridad local.

Consulta a tu odontólogo.

Fuente: Universidad Rey Juan Carlos

Foto: Thinkstock

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Juan José Aguilar es cirujano dentista por la Universidad de Guadalajara, México, y especialista en odontología estética y restauradora. Cédula: 5711438.